¡Por fin llegó el buen tiempo! Los días más largos y cálidos nos permiten pasar más tiempo al aire libre, aprovechando este maravilloso sol primaveral paseando o tomando algo en una terraza y, si es posible, bajo una gran sombrilla personalizada.
Las marcas de bebidas y tabacos conocen de sobras el impacto publicitario de este objeto después de muchos años de utilizarlo. Asociado a momentos de placer y dolce far niente, forman parte tanto del paisaje como de las campañas de márketing.
Es cierto que el precio de compra de un producto promocional como éste no es ni mucho menos el mismo que el de un bolígrafo o un encendedor, pero es que no todos los artículos publicitarios tienen la misma vida útil ni se dirigen hacia iguales objetivos, por lo que en este caso, hablaríamos más de regalos de empresa, que realmente de objetos publicitarios.
